Pena de muerte. ¿Sí o no?

El otro día en clase surgió un debate sobre la pena de muerte. Es un tema al que es muy difícil llegar a una conclusión, el pena de muerte a favor o en contra. Durante la clase pudimos escuchar distintas opiniones acerca del tema, se debatió sobre si se debería imponer en España esta ley o no, si defendiamos la pena de muerte, si no la defendíamos y porque.

Antes de opinar acerca de este tema me gustaría dejar claro en que consiste la pena de muerte:

La pena de muerte, pena capital o ejecución consiste en provocar la muerte a un condenado por parte del Estado, como castigo por un delito establecido en la legislación; los delitos por los cuales se aplica esta sanción suelen denominarse «delitos capitales».

La pena de muerte es un tema muy debatido actualmente, a día de hoy hay muchos países que la mantienen, y también muchos otros que la han abolido. Me gustaría destacar que en clase diferenciamos dos tipos de argumentos que se dan para justificar la pena de muerte o para no justificarla. Estos argumentos van desde lo emocional a lo racional.

Los que justifican la pena de muerte, buscan un castigo ejemplar para alguien que ha cometido un delito grave, (ya que la pena de muerte no es solo para aquellos acusados por asesinato) y que ha atentado contra los derechos fundamentales de las personas, como puede ser el derecho a la vida, y consideran que si alguien ha sido capaz de cometer un acto de ese tipo pierde todo el derecho a la vida. Sin embargo, estas mismas personas caen en el error puesto que el quitar la vida a una persona conlleva a violar esos derechos fundamentales en los que se ha apoyado. Creo que si justificaramos la pena de muerte por el hecho de que "si una persona no tiene respeto por una vida humana , no deberíamos respetar su propia vida" estaríamos cayendo en un error ya que sería un círculo vicioso en el que una persona mata y es castigada con la muerte.

Otra de las razones que utilizan las personas que defienden la pena de muerte, es el coste económico que le supone al estado tener a una persona encerrada de manera perpetua, de manera que aplicando la pena de muerte, estos costes serían menores. Por el contrario los que se oponen a esta idea plantean la pregunta de “¿Qué es más importante, el coste económico o el coste humano?” puesto que la cárcel es una forma de reinserción social y no una forma de castigo únicamente por aquel delito que se ha cometido. Estas personas aportan una visión más racional que emocional, ya que piensan en las consecuencias que pueden darse una vez aplicada la pena de  muerte.

Por otro lado, y desde una visión más humana, las personas que viven de cerca la pérdida de un ser querido, o ven como alguien es capaz de quitar la vida a un ser indefenso, opinan que la pena de muerte sería la mejor opción, Estas personas aportan argumentos desde un lado más emocional que racional, y no se paran a pensar que están cometiendo el mismo error, puesto que al privar de la vida a un ser humano, te convierte en la misma persona contra la que luchas. Tampoco se paran a pensar en el dolor que sentiría la familia del agresor si se le impone la pena de muerte y no se le da opción a reinsertarse en la sociedad.

Otro error que se cometería  si se implantara la pena de muerte es que matarían a un número de personas inocentes que han sido acusadas por un delito que finalmente no han cometido. Ya que puede darse el caso de un error judicial.  En un estado en el que no está implantado este sistema, la persona podría abandonar la cárcel y recuperar su derecho a  la libertad.

Me gustaría dejar claro que la mayoría de las personas caundo se les pregunta acerca de este tema suelen apostar en una primera estancia por defender su posición desde una manera más emocional que racional. Pero creo que en realidad no somos nadie para decir sobre la vida de otras personas, porque esto implicaría desechar las segundas oportunidades, y yo soy partidaria de las segundas oportunidades.

Finalmente, yo puedo decir, que estoy en contra de la pena de muerte  ya que el sistema penal es una forma de reinserción social, es una forma de pago para aquellos que han cometido un crimen en contra de la sociedad. Todos tenemos derecho a una segunda oportunidad y pienso que la mejor forma de vengar una muerte no es matar al asesino, sino reinsertarlo en la sociedad para que no vuelva a cometerlo. Para concluir pienso que no soy quien para privar a una persona de un derecho fundamental tan importante como es la vida.

LAURA.I